viernes, 11 de septiembre de 2015

CON LAS MANOS DE SANGRE



















Llenémonos las manos de sangre
y los ojos de olvido
miremos a otro lado,
que los de siempre
sigan sus cauces de miseria
y de derrota.


Llenémonos las bocas de palabras
y los ojos de olvido
miremos a otro lado,
que sus tristes destinos sin amparo
no salpiquen nuestras vidas miserables.
 
Pongamos vallas bien dispuestas
y que la hipocresía hable por nosotros
persignémonos con una lágrima
al ver como de nuevo
 el mar mece otro cuerpo a la deriva.
 
Llenémonos las manos de sangre
y los ojos de olvido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario