en el deseo abierto hacia la aurora,
tembló mi corazón al recordarte.
Y soñó con tus manos
derramando caricias,
recostado a mi lado,
fundido en mis sentidos.
Pero estás tan lejano
que mi amor no te llega
y éste beso que hoy siembro,
morirá en el olvido.
Y aún quedarán tus huellas
prolongando la ausencia.
Fue tu paso fugaz y sin embargo,
es un tiempo infinito
entre mi soledad y tu destierro.
Hoy busco en otro abrazo
la piel que no he tocado,
y no alcanza el anhelo,
para ahuyentar éste invierno.
Nunca un beso podrá morir en el olvido; nunca un beso pasará desapercibido; nunca un beso olvidará su huella por muy lejanos que se encuentren los labios que lo regalaron.
ResponderEliminarHermosa composición, Inma. Abrazos.
Gracias Pedro,
ResponderEliminarAbrazos,
Inma
PASE A VISITAR TU BLOG...UN LUGAR MUY CÁLIDO....FELICITACIONES POR TUS LETRAS...
ResponderEliminarGracias Lila, me hace feliz que te hayas pasado y que te guste.
ResponderEliminarAbrazos,
Inma