Llenémonos las manos de sangre
y los ojos de olvido
miremos a otro lado,
que los de siempre
sigan sus cauces de miseria
y de derrota.
Llenémonos las bocas de palabras
y los ojos de olvido
miremos a otro lado,
que sus tristes destinos sin amparo
no salpiquen nuestras vidas miserables.
y los ojos de olvido
miremos a otro lado,
que sus tristes destinos sin amparo
no salpiquen nuestras vidas miserables.
Pongamos vallas bien dispuestas
y que la hipocresía hable por nosotros
persignémonos con una lágrima
al ver como de nuevo
el mar mece otro cuerpo a la deriva.
y que la hipocresía hable por nosotros
persignémonos con una lágrima
al ver como de nuevo
el mar mece otro cuerpo a la deriva.
Llenémonos las manos de sangre
y los ojos de olvido.
y los ojos de olvido.
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